Por el segundo partido amistoso del triangular de verano que está disputando junto a Boca, Independiente le ganó 2-0 a Everton en el estadio San Juan del Bicentenario con goles de Tomás Pozzo de penal y otro de Mauricio Cuero de tiro libre, mientras que el conjunto chileno tuvo el descuento, pero Diego Segovia se lució con una gran estirada.
El equipo de Leandro Stillitano saltó al campo de juego en busca de conseguir la primera victoria del año tras el empate ante Boca y consiguió abrir el marcador a los 24 minutos del primer tiempo, cuando Tomás Pozzo logró convertir la pena máxima que le cometieron a Javier Ostachuk. Pelota para un lado, arquero para el otro y festejo efusivo para desahogarse del juvenil.
Luego del primer tanto, el Rojo logró mostrar una mejor cara, su volumen de juego creció y a los 43 minutos de la primera mitad consiguió estirar la ventaja. Mauricio Cuero se hizo cargo de un tiro libre en las cercanías del área rival, decidió ejecutar por afuera de la barrera y logró inflar la red para conseguir su estreno goleador en la entidad de Avellaneda.
Ya en complemento, en los primeros minutos de juego, más precisamente a tan sólo 3 de la reanudación, Braian Martínez tuvo el tercer tanto del Rojo, pero increíblemente no pudo tan sólo empujarla sin arquero y con todo el arco a su merced luego de una defectuosa definición del delantero uruguayo y flamante refuerzo Martín Cauteruccio, quien tampoco pudo convertir un gol que parecía estar casi hecho. De esos errados difícil de explicar.
En los minutos siguientes, las situaciones de peligro dejaron de aparecer, el ritmo de juego mermó de forma notoria, pero el conjunto transandino tuvo el tan ansiado descuento mediante un penal al minuto 33 del segundo tiempo. Sin embargo, Diego Segovia agigantó su figura y con una gran estirada contuvo el disparo desde los doce pasos para sentenciar la victoria de Independiente en tierras cuyanas ante los transandinos, que iban a finalizar el encuentro con un hombre de menos ya que al minuto 41 Matías Castro vio la tarjeta roja por una brutal plancha.